El pasado 16 de octubre celebramos una reunión de seguimiento del proyecto Watershift en las instalaciones de Hotecma. Este proyecto de piscina experimental ya ha dado por concluída su primera fase, en la que se ha instalado tecnología avanzada y de sensorización de la piscina experimental. Con ella, aportada por las empresas participantes en el proyecto, podrán iniciarse los trabajos que llevarán a alcanzar los objetivos del proyecto. De hecho, en estos momentos, la piscina ya empieza a aportar datos procedentes de los contadores y caudalímetros, así como de los equipos de tratamiento inicialmente instalados.
En la reunión, la responsable en CLIQIB, Kristin Baumann explicó los avances realizados hasta ahora, además de introducir el calendario científico de los próximos meses. Además, presentó los resultados preliminares de la fase dos, consistente en la simulación de carga humana en la piscina, en condiciones controladas. Esta tarea será llevada a cabo por la UIB. El Dr. Antonio Doménech expuso los componentes seleccionados para ella y detalló el protocolo de contaminación homogéneo y reproducible de los más de 40 experimentos planificados.